Los vinos de Finca Valonga
En Finca Valonga, la tradición vinícola y la innovación se unen para producir vinos de calidad. Nuestros viñedos, ubicados en Huesca, se benefician de un clima y un suelo que favorecen el cultivo de uvas con características únicas.
Directamente adyacente a estos viñedos se encuentra nuestra bodega. Con una capacidad para procesar la uva de nuestras 60 hectáreas, está equipada con tecnología avanzada que nos permite mantener la esencia y calidad de cada uva. Desde la selección hasta el embotellado, cada paso está diseñado para garantizar la excelencia.
Los vinos de Finca Valonga son un reflejo de la dedicación y el esmero con el que trabajamos.
Las nueces de Finca Valonga
En Finca Valonga cultivamos y producimos nueces de alta calidad, controlando todo el proceso, desde el cultivo hasta la comercialización. Aseguramos calidad y seguridad alimentaria, sin productos químicos ni blanqueado. Aprovechando condiciones agroclimáticas ideales, recogemos nueces a finales de septiembre y octubre. Tras la recolección, las limpiamos y seleccionamos. Las clasificamos por tamaño y las envasamos según demanda. También ofrecemos nueces en grano.
Propiedades de las nueces:
Consumir 30 gr de nueces reduce en un 30% el riesgo de enfermedades cardiovasculares. Ricas en antioxidantes y omega 3, combaten enfermedades relacionadas con la edad y cáncer. Son ideales para ensaladas, postres y aperitivos. Consumir 3-4 nueces al día es beneficioso.
Nutrición (100 grs.):
649 kcal, 14 gr proteínas, 4.4 gr carbohidratos, 5.8 gr fibra, 62.5 gr grasas. Contienen vitaminas, minerales y potentes antioxidantes.
Los aceites de Finca Valonga
Nuestro Aceite de Oliva Virgen Extra proviene exclusivamente de nuestra plantación de olivos que se encuentran en la misma finca.
Nuestra producción es monovarietal, de olivos exclusivamente arbequina. Es el jugo natural de una selección de aceitunas saludables y cuidadosamente conservadas, de las cuales extraemos el aceite el mismo día de cosecha mediante presión en frío, sin sobrepasar los 30°C en ningún momento de la molienda.
Posteriormente, el aceite se deja sedimentar en la bodega y, una vez filtrada; se procede al envasado obteniendo así un aceite de oliva natural sin aditivos ni conservantes, con baja acidez y un extraordinario fruto.