El día de Reyes trae muchos momentos en familia, de disfrutar con los nuestros, y además, el roscón de Reyes. El roscón, bendita tradición, que nos hace esperar tanto esta fecha como locos, no es un pastel corriente, es una maravilla de la repostería que, junto con nuestros ingredientes cosechados en la finca, hemos querido realizar para este día tan especial.
Para esta receta necesitaremos los siguientes ingredientes
2 huevos
30 gramos de nueces picadas Valonga
450 g de harina
150 g de harina
50 g de mantequilla
175 ml de leche
35 g de levadura
1 cucharada de ralladura de naranja
Una pizca de sal
1 yema de huevo para pincelar el roscón
Por último, para decorar el roscón necesitaremos nueces Valonga, fruta escarchada y 20 g de azúcar
Elaboración
En primer lugar, deberemos dejar diluir la levadura en unas cucharadas de leche tibia. Posteriormente le daremos forma de “volcán”, para añadir a la masa todos los ingredientes nombrados. Hay que trabajarlos hasta formar una masa homogénea, a la que después le daremos forma de bola, y la taparemos con un paño. Hay que dejarla reposar durante 3 horas, hasta que su tamaño se duplique.
Una vez hecho esto, pondremos el roscón en una bandeja, y le haremos el agujero en el centro; además lo estiraremos para darle la forma final del roscón. Dejaremos reposar a temperatura ambiente durante 2 horas para que la mezcla fermente y se compacte más. Aprovechamos para precalentar el horno, a unos 200º.
Por último, comenzamos con darle unas pinceladas al roscón con la yema batida, y repartimos las nueces enteras por su superficie, así como la fruta escarchada. Haremos una mezcla con el azúcar y unas gotas de agua para espolvorear el roscón. Hornear el roscón a 200º durante no más de 30 minutos. Para finalizar, dejar enfriar y servir.